Alabanzas a María Santísima

Autor:

 

Oh María, Virgen santísima, yo te bendigo de
todo corazón, sobre todos los ángeles y santos
del cielo, como la hija del eterno Padre, y te
consagro mi alma con todas sus fuerzas.
Ave, María ...

Oh María, Virgen santísima, yo te bendigo de
todo corazón, sobre todos los ángeles y santos
del cielo, como la Madre del Hijo unigénito
de Dios, y te doy y consagro mi corazón con
todos sus sentidos.
Ave, María ...

Oh María, Virgen santísima, yo te bendigo de
todo corazón, sobre todos los ángeles y santos
del cielo, como la esposa predilecta del Espíritu
Santo, y te doy y consagro mi corazón con
todo sus sentimientos y te suplico que al mismo
tiempo, me alcances de la Santísima Trinidad
todo lo que me sea necesario o útil para
alcanzar la eterna salvación.
Ave, María ...

Madre admirable, enséñanos a luchar contra
todos tus enem igos y a propagar tu reino. Que
el mundo entero se renueve en ti con amor y
fiel incienso ofrecido a tu Hijo, el Señor.
Ave, María ...

Reina, yo creo en tu poder. Oh Madre admirable,
yo creo sin ver. Tu soberanía victoriosa
me da aliento y confianza de que no fallará.
Yo te amo, oh Madre que siempre me amas.
Yo te amo también aunque nada me des. Aumenta
mi fe, confianza y fervor. En todo dame
a conocer tu amor. Amén.
Ave, María ...

¡Oh Madre, nunca te podré agradecer lo suficiente!
¡Qué todo mi cuerpo te alabe y agradezca
eternamente! Y, ¡qué cada pensamiento
mío te alabe y agradezca eternamente! ¡No
sé, Madre mía, que más te puedo decir, sino
que mi alma siente inmensa gratitud!
Ave, María ...