De Esclava a Reina

Padre Tomás Rodríguez Carbajo


1.- María la “esclava” del Señor.
. Una idea que tenemos todas las personas es la de mejorar, la de superarnos en todos los campos, es algo inherente en todo ser vivo, que tiende a crecer, si no quiere morir.
. En las primeras páginas del N.T. encontramos a María haciendo una profunda profesión de lo que sinceramente se creía ante Dios. Recibido el mensaje del cielo, para que conociese la voluntad de Dios sobre lo que había pensado acerca de Ella, ante la inesperada propuesta de la gran amabilidad de parte de Dios para salvar al hombre, María, que tenía un papel importantísimo en aquel tramado por haber sido escogida para Madre de Dios, con toda sinceridad, consciente de su gratuita elección para ocupar un puesto de alto relieve en la Historia de la Salvación, se proclama: “He aquí la esclava del Señor” (Lc.1,38).
. El esclavo en sentido real estaba equiparado a la condición de cosa u objeto con el que el dueño podía hacer lo que quisiera sin dar cuenta a nadie; pero en sentido figurado y desde un punto de vista religioso la esclavitud es la condición moral del hombre perfecto, así “María es la esclava del Señor” y Jesucristo es el Siervo de Dios que tomó la forma de “esclavo” (Filp.2,7).
. Con la respuesta que dio María al ángel nos mostró su alta catadura espiritual, su entera y absoluta disponibilidad para aceptar siempre la voluntad de Dios. Esta condición de “esclava” del Señor le llevó a ser la esclava y servidora de los hombres sus hermanos(Mt.20,27; Mc.10,44), pues, el amor a Dios nos lleva a amar a los hermanos y todo acto de amor lleva consigo el ser “esclavo”, servidor de quien se ama..

2.- Dios proclama a María Reina.
. María desde la concepción hasta su final terreno y más allá, tuvo una sarta de privilegios, que no fueron fruto del esfuerzo personal, sino pura gratuidad de Dios, aunque siempre prestó su colaboración.
. El último privilegio que Dios le concedió fue llevarla en cuerpo y alma al cielo. En Ella se sintetiza toda la belleza y todo el poder de la creación, visible e invisible, por su prerrogativa de Madre de Dios.
. El Vaticano ll nos dice: “La Virgen Inmaculada preservada inmune de toda mancha de culpa original, terminado el decurso de una vida terrena, fue asunta en cuerpo y alma a la gloria celestial y fue ensalzada por el Señor como Reina Universal con el fin de que se asemejase de forma más plena a su Hijo, Señor de Señores, y vencedor del pecado y de la muerte” (L.G. 59).
. Dios la ensalzó sobre todos los seres creados. Todos los grupos, gremios o estamentos la pueden proclamar “Reina”, se le proclama “Virgen de los Reyes” y en las letanías “Reina de los Apóstoles”, “Reina de los Profetas”, “Reina de los Mártires”, “Reina de todos los Santos”.
. La que comenzó el N.T. proclamándose la “esclava del Señor”, terminó siendo constituida Reina de todo el universo.