La Corona de espinas

Fray Alejandro R. Ferreirós OFMConv

 

 

Rey de gloria, de espinas tu corona
clavado está en tu mente mi pecado
te contemplo reinando ensangrentado
y el dolor, en tu herida, se aprisiona.

La Virgen que te mira, erguida y firme. 
Compadece su alma tu figura
tu sangre la bendice, es agua pura.
El tentador que quiere confundirme.

Coronada de espinas, tu realeza
tu rostro tan sereno destrozado
marchita está la fuente de belleza.

El siervo de Yahvé, desfigurado
sólo Ella comprende tu grandeza
y reinas con un manto de granado.