La Visitación

 

Padre Martín Serantes

 

 

Corriste,
de prisa fuiste a lo de tu prima.
Con la prisa del Espíritu,
llevabas a Dios. 

Corriste María,
saludaste, cantaste.
Canta en nosotros tu Magníficat,
corre a nuestro encuentro.

 

Fuente: Soledad Mariana, Argentina