En mi corazón

 

Rafael Ángel Marañón

 

 

Es en mi corazón la más hermosa, 
La que a mi redentor le dio la vida, 
La que a mi pobre alma redimida, 
Proporciona la paz en que reposa. 
 
Ya no queda más duda tenebrosa, 
Ni está mi fortaleza restringida 
Que ha sido en tu virtud enriquecida 
Y animada en tu plática mimosa. 
 
Un abismo separa a los salvados 
Que por ti permanecen abrigados,   
De la gente perdida en sus pecados. 
  
¡Gracias madre! por todos tus cuidados 
Haciéndonos felices y agraciados   
Y ser de tu grandeza abanderados.