Bajo el sol

 

Rafael Ángel Marañón

 

 

Camino bajo un sol tan inclemente
De pena, de pecado y de caída,
Que mi senda tornó seca y perdida,
Donde ya me despeñaba cual torrente. 

Me acosa una aflicción tan persistente,
Que lleva a mi conciencia dolorida
A ti, María, sufriendo su caída
Si no estás junto a mí, madre clemente. 

Y peno y me consumo, sin tu lumbre 
De amor que me restaura si a mí vienes,
Y me lleva hacia la más excelsa cumbre. 

Tengo, por ti, segura certidumbre 
De extirpar de mi alma los vaivenes 
Que producen mi mal y pesadumbre.