Villancico de los Pastores 

Eduardo González Lanuza 

 

 

Copos de luna la Virgen 
hilaba en delgados hilos. 
Con ellos borda Santa Ana 
una camisa de lino. 
-Para quien bordáis, seńora, 
esa ropita de nińo? 
-Para quien ha de nacer 
en una noche de frió, 
carne Serra de mi carne 
y Espíritu del Espíritu.