Emails a María

 

Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

 

Asunto: Luz y yo

María, ese que está sentado frente a las tres cruces soy o puedo ser yo. La luz que ve en el fondo me recuerda que tras la muerte, viene el mundo de la luz. Hoy, María, hablar de muerte, enfermedad resulta una ofensa. En una sociedad que se jacta de bienestar y placeres, la muerte es un absurdo imbécil y lo mismo la enfermedad.
Por eso la ocultan lo más posible, hasta que han muerto. L muerte iguala a todos por igual. Se creen privilegiados porque con el dinero se va a las mejores clínicas del mundo. Y no. La enfermedad sigue su curso. ¿Por qué apegarse tanto al dinero, a la fama, al afán de poseer? Es el último epitafio imbécil del ser humano. Gracias, Maria por aceptar el door como una forma de purificación para el Reino de tu Hijo y como una etapa normal del ser vivo. Tres cosas: Alegría al nacer, dureza de la vida y llanto en la muerte. Para el creyente, la muerte es el paso para la eternidad feliz, no para la cremación o el nicho en el cementerio..

Fuente: autorescatolicos.org