El pecho de María

 

Padre Javier Leoz

 

¿No hay nada tan grande, sean circunstancias buenas o malas, negativas o positivas, de éxito o de fracaso, como tener un pecho confidente. Un alguien con el que compartir esas experiencias.

El pecho de María, simboliza ese lugar en el que nosotros confiamos alegrías y penas, ilusiones y esperanzas, proyectos e ideales cristianos.

Pero, además, el pecho de María, es ese rincón al que siempre podemos acudir en busca de sosiego, paz, serenidad y respuestas.

Ella, interiormente, supo trabajar la voluntad de Dios. Por ello mismo, cada vez que ponemos nuestro oído en el pecho de María, sentimos el palpitar de una mujer que quiso ser grande desde la pequeñez, la entrega o la obediencia.

El pecho de María simboliza el pecho del mismo Dios, pues en El, residen los secretos y los misterios más añorados por los profetas, por los creyentes y por el mismo Jesús.

Seguimos adelante en este mes de mayo. ¡Demos gracias a Dios por este tiempo de la Pascua! Por tener la posibilidad de contar con una Madre que, en su pecho, nos aprieta para que no perdamos el valor de la fe, la alegría de creer y la seguridad de que camina junto a nosotros.

Simbolizando el pecho de María, que tantos secretos encierra, presentamos en este día un cofre. Que Ella nos ayude a saber atesorar lo que merece la pena.

Fuente:  autorescatolicos.org