María sigue siendo nuestra Madre

Padre Tomás Rodríguez Carbajo  

. La única finalidad de mi vida espiritual es amar a Dios, esta realidad se realiza en cultivar la vida sobrenatural, que se me ha comunicado en el día de mi bautismo. San Pablo nos dice que ha sido derramada en nuestros corazones por el Espíritu Santo, que se nos ha dado.

. Cierto que Dios es la fuente de toda bien natural y sobrenatural, pero en su inescrutable providencia ha querido "necesitar" de las criaturas para que el bien llegase a nosotros. María es una pieza imprescindible en los planes salvadores de Dios. Si por Ella Dios quiso llegar a nosotros, sigue siendo necesaria su ayuda, para que los frutos de la salvación se hagan presentes en nuestra vida.

. No perdamos de vista que María es un medio elegido libremente por Dios, pues, la causa principal y el fin último de nuestra vida espiritual es Dios.

. María es la Medianera de todas las gracias, una gracia importantísima es el que nazca en nuestro corazón y se desarrolle esa vida divina dentro de nuestro ser. Si, para que el Hijo de Dios se encarnase en su seno, se le pidió el consentimiento materno a María. Cómo no va a intervenir con su intercesión y libre consentimiento para que se implante la vida divina en la nuestra?. 


. Todos los planes de Dios son necesariamente perfectos en todos sus aspectos y dimensiones, si decretó que de la libre decisión de una humilde jovencita nazarena dependiera todo el plan de la Encarnación y, como consecuencia, de la Redención de los hombres, quiso que las gracias, que llegasen a nosotros, pasasen también por el beneplácito de María, que como Madre nuestra siempre desea lo mejor para sus hijos, y el bien más grande es el poder participar de la vida divina.

. El corazón de María es un corazón humano, que tiene sus propias emociones:
- Es sensible a las atenciones que le prestan sus hijos.
- Se deja ablandar por los ruegos y lágrimas.
- Es incapaz de resistir a cualquier muestra de afecto.
- Se siente atraído por la sencillez y humildad de corazón.

. Esto hace que su Hijo no la contraríe en su obrar y en sus afectos de Madre, será especialmente generoso para con aquellos que Ella ame y por quienes ruegue.

. María tiene como algo constitutivo en su vida el ser Madre de Dios y de los redimidos, lo que le hace Medianera Universal de todas las gracias de las que nos beneficiamos las personas.

. El amor de Dios nos rodea a los seres humanos por todas partes, de El venimos, en El estamos y a El vamos; este amor paterno de Dios se ve complementado por el amor materno de María.

. Todo lo bueno que existe en el mundo es reflejo de la bondad de Dios; su ternura, su delicadeza, su dulzura, su cariño lo encontramos en el amor materno de María.

. S. Alfonso M de Ligorio nos dice que así como María llevó a Jesús en su seno, así lo lleva también en su corazón. También S. Agustín reconoce una doble maternidad en María: La de la carne y la del amor: "Tan milagrosamente fecundo es el corazón de María como lo fue su seno; su sangre engendró a Jesucristo, su amor concurrió a engendrar hijos a la Iglesia".

. La maternidad en María es algo constitutivo en su relación con Jesús y con nosotros, por lo tanto no dejará de ejercitarla, ya que sigue siendo Madre.