Catequesis Mariana II

Congregación para el Clero. Vaticano

 

8. EL MUNDO EN LAS MANOS DE MARÍA

- María del Magnificat

I. EXPOSICIÓN BREVE

María, en la Medalla Milagrosa demuestra que quiere a este mundo en que vivimos. Lo tiene en sus manos, se lo presenta al Padre, pide que le purifique de sus miserias. Un mundo bueno y maravilloso por un lado y, por otro, penetrado de pecado y encadenado por la serpiente. Un mundo en cuyo acabamiento según Dios estamos comprometidos sin excepción todos los cristianos.

Dice el Concilio de la Virgen María que "que ella sobresale entre los humildes y pobres del Señor, que confiadamente esperan y reciben la salvación" (LG 55)

Pues bien, la figura de María "sobresale entre los pobres y humildes del Señor": Ella es la Virgen pobre con los brazos abiertos sólo al cielo, con el corazón confiado sólo en Dios, con el alma apoyada sólo en la fe: porque se ha fiado de Dios, porque ha creído en su Palabra.

II. LECTURA DE LOS ESCRITOS DE SANTA CATALINA LABOURÉ

- La Virgen María tenía las manos elevadas a la altura del estómago de una manera muy natural, sosteniendo en ellas una esfera que representaba al mundo ... En ese momento en que yo la contemplaba, la Santísima Virgen bajó los ojos mirándome, y una voz se hizo escuchar en el fondo del corazón, que me dijo: "Esta esfera que ves representa al mundo entero ... y a cada persona en particular".

III. CATEQUESIS DEL PAPA SOBRE LA SANTÍSIMA VIRGEN

  • El misterio de María compromete a todo cristiano, en comunión con la Iglesia, a meditar en su corazón lo que la revelación evangélica afirma de la Madre de Cristo. En la lógica del Magnificat, cada uno experimenta en sí, como María, al amor de Dios descubrirá en las maravillas realizadas por la Santísima Trinidad en la Llena de gracia un signo de la ternura de Dios por el hombre. (Catequesis del Papa, L'Osservatore Romano, n.45, 10 noviembre 1995 - La Virgen María en la Sagrada Escritura y en la reflexión teológica)

IV. LECTURA DE LA PALABRA DE DIOS

  • Evangelio de San Lucas 1, 45-55

V. PARA LA REFLEXIÓN

1. A ejemplo de María. ¿meditas la Palabra de Dios en tu corazón?

2. ¿Cómo María nos enseña a trabajar por la unidad y la comunión entre los cristianos?

3. ¿Descubres en tu vida y en la de los demás el amor y la ternura de Dios?

4. ¿Cómo puedes ser humilde y pobre dentro de la sociedad que vives?

Fuente: clerus.org